No tengo palabras que se puedan comparar a la barbarie del que se dedica a colocar estas trampas. Tampoco que puedan describir la agonía cruel e incomprendida que el pobre animal ha tenido que padecer hasta morir.
Esta noticia llamará más la atención por ser especie en peligro de extinción y un patrimonio que nos atañe a todos, por lo que su destrucción es especialmente importante... pero una muerte así solo se la deseo al imbécil que va poniendo los lazos.